Los intervalos que se extienden más allá de una Octava se denominan Intervalos Compuestos. Vamos a estudiar los principales en esta lección.
Cuando escuchamos una canción que nos agrada, de manera instintiva y automática comenzamos a realizar pequeños movimientos, ya sea asintiendo con la cabeza o golpeando con la punta del pie, o incluso aplaudiendo con las manos. Al realizar estas acciones repetitivas y en forma sincronizada con la canción, estamos marcando el Pulso.
El Pulso es la unidad básica que se utiliza para medir el tiempo en una obra musical. Es esencialmente el latido sobre el cual está estructurada dicha obra, y al igual que con el latido del corazón, se mide en Pulsos Por Minuto o PPM, aunque universalmente se utiliza la abreviatura en inglés BPM (Beats Per Minute).
El Tempo es un concepto que está muy ligado al concepto de Pulso, tanto así que a menudo se suelen usar ambos términos indistintamente. El Tempo es la velocidad del Pulso, la cual se mide en BPM. Esto quiere decir que mientras mayor sea el Tempo, mayor cantidad de pulsos habrán en un minuto.
En una partitura el Tempo se suele indicar al inicio del pentagrama, como se puede ver en la imagen a continuación encerrada en un círculo.
El número indica la cantidad de Pulsos que hay en cada minuto. En el siguiente ejemplo escucharemos una sección rítmica tocada primero a un Tempo de 60 BPM, o 60 Pulsos Por Minuto, lo que significa que se toca un pulso por segundo. A continuación se escuchará la misma sección rítmica pero esta vez tocada al doble de Tempo, es decir, a 120 BPM, lo que significa que se tocarán dos pulsos por segundo. De esta manera comprenderemos mejor los conceptos de Pulso y Tempo.
El Tempo también puede indicarse por medio del uso de palabras en italiano, las cuales no indican una cantidad específica de BPM , sino una idea inicial de la velocidad, que puede establecerse dentro de un rango de valores de BPM. Algunas de estas palabras son: Larghetto (60 – 66 BPM), Adagio (66 – 76 BPM), Andante (76 – 108 BPM) y otras más que veremos en detalle en una lección posterior.
A lo largo de una obra musical los pulsos forman patrones repetitivos, agrupándose de diferentes maneras. Por ejemplo, al bailar un vals es fácil darse cuenta de que los pulsos están organizados en grupos de tres, con el primer pulso de cada grupo acentuado. A estos patrones de pulsos que se repiten a lo largo de la obra se conoce como Compás.
El Compás es la división del tiempo de una obra musical en pequeños segmentos, cada uno de los cuales comprende una cantidad definida de pulsos. El compás se identifica en una partitura mediante líneas verticales que dividen el pentagrama atravesando desde la primera hasta la quinta línea, llamadas Líneas Divisorias. Cada espacio comprendido entre dos líneas divisorias es un compás. La cantidad de pulsos o tiempos que cada compás contiene se indica mediante una cifra expresada en forma de fracción llamada Fórmula de Compás, que se encuentra al inicio del pentagrama. Aquí entramos ya en el concepto de Métrica.
La Métrica se refiere a la forma en cómo están organizados los tiempos en un compás. Indica la cantidad de tiempos que debe haber en cada compás, así como la figura musical que se toma como referencia para indicar el valor de un tiempo. Esto lo hace a través de la Fórmula de Compás.
El número superior, o numerador, indica la cantidad de tiempos o pulsos que hay en cada compás, mientras que el número inferior, o denominador, indica la figura musical que corresponde al valor de un pulso. El valor para cada figura se muestra en la siguiente tabla. En la siguiente lección estudiaremos a detalle las Figuras Musicales, así que no te preocupes, por ahora sólo recuerda que según el número que aparezca en el denominador habrá una figura cuyo valor corresponda a un tiempo.
Por ejemplo, si al inicio del pentagrama se indica un compás de 4/4 (Cuatro por Cuatro), significa que cada compás tendrá cuatro tiempos, y que cada tiempo equivale a una Negra, por lo que cada compás consta de cuatro Negras o de las figuras que sumadas den un total de cuatro tiempos. A continuación podemos ver una pequeña melodía escrita en compás de 4/4.
Existen diferentes tipos de compás, cada uno con sus propias características rítmicas, los cuales iremos estudiando en lecciones posteriores. Por lo pronto es necesario que asimiles los conceptos básicos, ya que ellos son la base sobre la que se desarrolla la teoría musical.
¡Nos vemos en la próxima lección!
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